Reto para toda la humanidad

 La humanidad tiene ante sí muchos e importantes retos: evitar las guerras, alimentar, proteger y educar al hombre y sus descendientes son algunos de ellos, pero quizá ninguno apremie tanto como luchar en conjunto para mitigar los efectos del cambio climático. La emisión de gases de efecto invernadero a la atmósfera se mantiene a un nivel que daña aceleradamente el clima. La temperatura aumenta, se descongelan los glaciares, sube a ritmo casi perceptible el nivel del mar, se agota el agua potable y con ello desaparecen centenares de especies y el hombre tiene cada vez menos medios para subsistir.
Es una realidad que algunos prefieren ignorar. Mientras prevalezca la codicia, la xenofobia y el odio sobre la solidaridad, el amor y el respeto por los demás, más cerca estaremos de vivir en un Planeta, donde muchísimos animales migren para las ciudades en busca de alimentos, la temperatura alcance niveles practicamente irresistibles, el agua salada ocupe las cuencas subterráneas, humanos y bestias deban trasladarse a zonas elevadas, la contaminación de los mares, ríos y lagos haga muy difícil sobrevivir en este todavía bello y salvable globo terráqueo.
 Aun estamos a tiempo de hacer mucho para, por lo menos, disminuir primero los daños al medio y después detener las emisiones que todos los días tienen lugar con el uso de los combustibles fósiles y grandes cantidades de productos tóxicos. Por eso es imprescindible exigir un comportamiento acorde con esta situación a quienes dan o pretenden dar la espalda a problema tan agudo, en el que le va la vida a la humanidad toda.




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